Tras el escándalo del amaño de partidos en la liga de Corea del Sur, los responsables han decicido introducir el polígrafo para pillar a los posibles jugadores tramposos. Además, doblarán el salario mínimo y ofrecerán una pensión a los futbolistas para evitar las tentacions de ganar dinero fácil.
La liga de Corea del Sur acaba de atravesar la peor crisis en sus 28 años de historia después de que fueran arrestados 46 jugadores por el amaño de 15 partidos desde los meses de julio a octubre del año pasado.
Por ello, las autoridades de la competición han decidido, ni más ni menos, que introducir el polígrafo para interrogar futbolistas sospechosos y evitar así futuros amaños y asegurar una competición totalmente limpia.
La medida de los responsables de la Liga K va más allá y han optado por doblar el sueldo mínimo de los futbolistas, además de introducir una pensión especial, y evitar con ello que los profesionales tengan que recurrir al dinero fácil que proporciona el amaño de partidos.
"Vamos a introducir un plan de pensiones para los jugadores y con ello mejorar los derechos y el bienestar de los jugadores", dijeron los jefes de la liga en un comunicado.
Sus clubes no podrán oponerse
Los jugadores que levanten alguna sospecha serán inmediatamente sometidos al detector de mentiras, y los clubes y entrenadores que se nieguen a la realización de la polémica pruebas serán suspendidos.
"Estamos trabajando para modificar las reglas de manera que si se repite el amaño de partidos, los equipos se pongan en gran desventaja ", dijo el comunicado.
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